Mariant Piqué
Cuando sientes miedo, ese miedo irracional, imaginario, que te paraliza y colapsa tu vida, tu cuerpo físico inicia un proceso de defensa que si no lo controlas hace que el miedo se ancle en todas tus células.
Sabes que tu estado ideal se produce cuando tu corazón está en coherencia cardiaca. Esto quiere decir que tu ritmo cardíaco es estable y tu respiración va acorde con él. Sientes paz, tranquilidad y bienestar. Tus pensamientos son nítidos y puedes ser altamente resolutiv@ y eficaz.
Cuando sientes miedo y me refiero tanto al miedo real como al imaginario, ese que se crea en nuestra mente sin ninguna base real, pierdes la coherencia cardíaca y si no la recuperas puedes entrar en pánico y más tarde en fobia.
Es lógico sentir miedo cuando se presenta un peligro real, como por ejemplo si el coche en el que viajas se desboca al encontrar una placa de hielo en la carretera.
Todo tu cuerpo físico reaccionará. Los músculos se tensarán esperando el impacto con el quitamiedos o con el coche que puede que viaje en dirección contraria.
Todas tus neuronas se conectan buscando las conexiones necesarias para que tu mente esté lúcida para recordar que hay que hacer en esta situación, y al mismo tiempo estás viendo una película con hechos importantes de tu vida, es como una revisión de vida que sucede en milisegundos, pero que abarca muchos años cronológicos.
Todos tus órganos reciben la orden del cerebro de generar cortisol, adrenalina y las hormonas y neurotransmisores necesarios para salvar la vida, ya que esta es la misión del miedo, salvar la vida de tu cuerpo físico.
Lo que quizás no sabes es que todos estos mecanismos que se han iniciado, también se inician, aunque con distinta intensidad, cuando tú creas una situación imaginaria que te produce miedo.
Todos estos miedos y muchos más que podríamos poner en la lista, son creados en tu mente o insertados inconscientemente por el ambiente en el que vives.
Y si tú los has creado tú también puedes transmutarlos y eliminarlos para vivir sin estos miedos que amargan tu vida.
El miedo es una mochila que alguien o tu mism@ has colgado en tu espalda, está llena de piedras de distintos tamaños y cada una de ellas tiene un nombre.
Debes ir vaciando esa mochila, mirando cada piedra que has recogido, de qué está compuesta, que peso añade a tu mochila, y por qué la has recogido, comprado o alimentado. Una vez hecho este análisis empezarás a disolverla hasta que no quede nada de ella.
Verás que la siguiente piedra es más fácil de destruir, ya que habrás entrenado el mecanismo necesario para ello y con paciencia y perseverancia, irán desapareciendo todas y cada una de ellas.
En ese momento soltarás la mochila, te sentirás libre, ligero@ y disfrutarás de la vida.
Si yo lo he hecho, tú también lo puedes hacer.
Hay muchas técnicas para eliminar miedos. Hay que ver cuál es la que mejor se adapta a ti, ya que eres únic@ e irrepetible.
En Internet puedes encontrar muchos consejos, pero pocos te cuentan que no es fácil aplicarlos, puesto que no basta con saber las diferentes técnicas, sino que es necesario e imprescindible entrenarlas con disciplina.
Te ofrezco acompañamiento para liberarte de tus miedos. Junt@s los sacaremos de la mochila, analizaremos y buscaremos el disolvente que mejor se adapte a cada uno de ellos.
Mientas puedes empezar practicando cada día la respiración consciente para estar en coherencia cardíaca. Te va a ayudar a "respirar ese miedo" en cuanto aparezca y te será más fácil disolverlo.
Vivir sabiendo cómo revertir los miedos imaginarios que conlleva la vida actual es posible.
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